Confidencias

Hay cosas que mejor no saber. Confidencias que llegan sin intención ni incluso deseo por parte de quien escucha. Pero llegan y lo hacen con todas las consecuencias. Son secretos que roba el viento y los transporta en su silbido hasta hacerlos llegar a oídos siempre de la persona implicada. Aparecen en el momento menos esperado y sin previo aviso, sin la advertencia que salvaría de más de un disgusto. Pero una vez se manifiestan su efecto es irreversible. Ya es turno de quien recibe la información. Y surge la duda. ¿Qué hacer con lo que acabas de conocer sin ni siquiera buscarlo? Puedes interiorizarlo, aceptarlo y acatarlo sin preguntarte nada más. O también puedes rechazarlo, ignorarlo y olvidarlo sin preguntarte nada más. Pero es triste. Tanto lo uno como lo otro. De cada acto, de cada circunstancia, de cada momento, de cada situación podemos sacar conclusiones. Profundizar y cambiar la perspectiva para valorar el asunto desde el punto de vista más amplio posible. Las primeras impresiones no siempre son acertadas. Y si éstas no lo son, menos todavía las primeras valoraciones. Las decisiones deben dejarse para el momento oportuno, una vez superado y dominado el impulso primario. Más vale apostar por la prudencia y la templanza. Cabeza alta, paso firme, voz pausada. "Todo pasa y nada queda", ya lo dijo el poeta. Y si lo nuestro es pasar, yo prefiero hacerlo dejando huella, para que mis pisadas dejen rastro y a quien le corresponda sepa siempre donde ir para encontrarme.

Y es que Sucede Que Hoy se corrió la voz...

6 comentarios :

Anónimo | 00:03

Hola Pablo, te imagino pasando por un momento triste, las confidencias negativas que nos afectan son un golpe además sin van sin aviso, son un "golpe bajo". Las confidencias tienen valor depende de quién venga, si tiene esa fuente en "términos periodísticos" valor, o por el contrario no lo tiene y busca esa fuente la confusión y el hacer daño. Eso lo tienes que valorar tú. Está muy bien lo de la templanza y no dejarse llevar por los primeros impulsos, analízalo y valóralo. Pero hoy no, tal vez mañana o después de mañana. Me imagino que tipo de confidencia o secreto se ha corrido la voz, no hace falta ser demasiado avispado. Por ahí creo que hemos pasado muchos. Creo intuir que se refiere al "tú" de los últimos post, pero tú has dicho que el hilo se terminó de desprender, si es así, deja que la vida continúe su ritmo y acepta lo que no tienes más remedio que aceptar, porque sin ser demasiado astuto me imagino qué tipo de confidencia te ha llegado, y duele, claro que duele, te sientes traicionado después de tanto tiempo esperando. Algunos ya te avisábamos, tal vez has pecado un poco de ingenuo o confiado. Todos lo hemos sido alguna vez. Ahora sólo queda mirar hacia adelante, no perderte la vida, y aprender de la experiencia, y observar los daños colaterales que te haya podido producir, pero siempre seguir adelante. Lo que no entiendo es el final del post cuando dices:
"Y si lo nuestro es pasar, yo prefiero hacerlo dejando huella, para que mis pisadas dejen rastro y a quien le corresponde sepa siempre donde ir para que me pueda encontrar.". No sé si es que albergas esperanzas de que te vuelva a encontrar a pesar de todo, o en fin que no entiendo el sentido. Imagino que no estarás de humor, pero tú mismo has dicho que no quieres perderte la vida, pues es momento de aplicarlo.
Mucha luz y energía te envío, y que sepas que por circunstancias así hemos pasado muchos, y efectivamente "todo pasa ".
Ánimo y un fuerte y energético abrazo.

Pablo Martín Lozano | 00:13

Hola Miguel, gracias por el comentario.

Confío en tu intuición y supongo que acertarás con la confidencia pero no estoy en ese momento triste del que hablas. Yo cumplo lo que digo. Y dije hace poco que no quería perderme la vida. Y en eso estoy. La confidencia no me ha afectado lo más mínimo, pero era motivo suficiente para reflexionar y más tarde llevarlo a un post por si a alguien le hace falta leer algo así y no tiene las cosas tan claras como yo las puedo tener ahora.

Valoro todo: las fuentes, las consecuencias, la veracidad, etc., pero además cuento con esa templanza que digo y la suficiente capacidad para sobreponerme a este tipo de cosas. Uno aprende siempre. Yo esto lo aprendí hace mucho.

En cuanto al final...bueno, nada es tan drástico como parece. Y el secreto está en tener perspectiva y saber aplicar cada cosa en su momento y entenderlo según las circunstancias de entonces. A largo plazo nadie sabe. Y menos cuando, como digo, nada es tan drástico ni negativo como parece. Digamos que no siempre es el momento adecuado. Pero eso no quiere decir que no pueda llegar el día.

Gracias por la luz, la energía y el apoyo, pero de veras que no estoy afectado. Todo pasa, amigo. Y ya pasó.

Otro abrazo.

Ananda | 10:46

Hola a tod@s..

Las situaciones de la vida que ha todos nos pasan son las mejores oportunidades para ver en qué momento de madurez interna nos encontramos. Es ahí cuando vemos con qué serenidad, sabiduría y amor nos tomamos las experiencias y reaccionamos a ellas..

Sabia actitud la de antes de reaccionar a una situación "tensa, dificil y conflictiva" respirar, serenarse y dejar momento a la reflexión con la Luz para así tomar la más sabia y adecuada acción...Pues cada situación es un mundo..

Con las "Confidencias" que nos pueden llegar...,la acción a tomar o no tomar depende del "tipo" de confidencia, persona, momento y circunstancia...La manera de tratarla puede llegar a ser diferente en cada caso..

¿Qué hago entonces ? ...Recurrir a la la reflexión interna, a la pregunta orientada a las entidades celestiales para que me iluminen sobre la más adecuada manera de actuar..
Pues si llevados por el momento, sin reflexión, actuámos negatívamente ,desencadenamos efectos irremediablemente que ya no podremos parar ....

Cuando se es Consciente de la Ley Causa-Efecto, que toda acción tiene consecuencias, nuestra manera de ver la vida cambia y nuetra manera de actuar , por ende, también..

Son las Pruebas Existenciales que están ahí para hacernos avanzar pues si no, nos quedaríamos estancados y la evolución es contínuo movimiento.

¡Bendítas circunstancias que nos hacen reflexionar y nos ponen frente a nosotros mismos pues gracias a ellas avanzamos!

Un abrazo.

Luz Wilson. ¡ Que sea la Luz !

Pablo Martín Lozano | 13:41

Hola Luz! Gracias por permitirnos continuar leyendo tus reflexiones.

La vida es un aprendizaje continuo y nosotros mismos somos seres evolutivos y cambiantes. Por eso no nos enfrentamos de la misma manera a una misma situación en diferentes ocasiones. Al menos no de manera natural.
El tiempo nos hace ser distintos -quiero pensar que mejores- pero al menos diferentes, y vamos aprendiendo a ser.
El mundo sería otro si por un momento todos sus habitantes callaran al mismo tiempo durante unos minutos y se dedicaran sólo a disfrutar del silencio externo, para comenzar a escuchar la voz interna.
Pero parece que estamos lejos de algo así. Pero como digo -como dijo-...lo nuestro es caminar.

Un abrazo.

Encarni | 15:36

Hola Pablo. A veces escuchamos, nos cuentan cosas que si tuvieramos la oportunidad de elegir decidiríamos no escuchar. En alguna que otra ocasión he deseado poder cerrar los oídos con la misma facilidad que cerramos los ojos pero es imposible. Hay momentos en los que alguien nos cuenta lo que nosotros ya sabíamos pero no queríamos ver.

Lo de "Todo pasa y nada queda" se aprende con la experiencia, porque no hay mejor maestro en esta vida que ella.

Yo siempre he preferido una verdad a tiempo aunque duela a una mentira infinita.

Sea lo que sea aquello que te contaron, simplemente aprende y sigue caminando.

Un abrazo enorme.

Pablo Martín Lozano | 16:15

Hola Encarni.
Yo también prefiero siempre la verdad; vivir en la mentira es peor que vivir en la ignorancia. Y yo odio ambas cosas.
Pero yo a lo mío, que es caminar, a veces por senderos marcados, pero otras abriendo yo esos senderos.

Otro abrazo enorme.