Dame Tregua y Libertad

Dame Tregua y Libertad

Cada día la vida nos regala un ticket para escapar de la rutina. A veces lo cogemos, otras ni nos damos cuenta de que nos lo están ofreciendo. A veces el silbido del tren llama hasta en tres ocasiones antes de partir, pero otras ni siquiera avisa y eres tú quien debe estar atento.

La vergüenza es la peor enemiga de estas situaciones. La que te hace pisar el freno, la que te tapa los oídos para que no escuches el último aviso del tren, la que te cierra los ojos cuando pasa ante ti el revisor y la que coarta tus ganas de embarcarte en historias sin final.

Si pudiera salir de casa un día y olvidarme por descuido la vergüenza, seguramente pasaría una jornada de lo más divertida y repleta de guiños del destino. Pero es difícil. Justo antes de que me despierte ya se queda a mi lado por si intento escapar y no me abandona el resto de las horas. Es una situación asfixiante que me persigue sin darme tregua. Todo esto ha de cambiar.

Que no hay nada más bonito que el olor a libertad. Que la vida se nos va en cada expiración y la debemos aprovechar. Que al fin y al cabo sólo nos quedamos tu, yo y el sueño de que si tiene que ser, será.

Y es que Sucede Que Hoy la vida me invita a mirar de frente...