Flotando A La Deriva

Como un leño a la deriva impulsado por el oleaje de tu marea hasta que llegue el día de quedar varado en la playa de tu boca. Flotando en la superficie de un mar turbio de sentimientos cálidos enfriados a fuerza de distancia y silencio. Vagando sin rumbo a nado hasta desistir y entregarme sumiso a la corriente. Empapando mi espalda con el agua gélida que desprende el iceberg de tu temporalidad tozuda pero necesaria, mientras mi rostro mira al cielo y contempla taciturno la luna. Surcando sin norte ni brújula los océanos de tu mirada azul ausente. Arrastrándome sin fuerzas en la dirección opuesta a la costa que se expande en el desfiladero de tu pecho. Recorriendo millas sin sentido con la incertidumbre de si me acercan o me alejan más de ti. Y aunque las fuerzas no han flaqueado por momentos sube la marea y siento el agua al cuello. Gana en intensidad el oleaje y me empuja como a una lágrima en el recorrido infinito del torbellino bravo y feroz hacia las profundidades de la oscuridad absoluta. Y cuando estoy a punto de sucumbir ante el despiadado embate del mar, una luz se apodera de mi cuerpo y me empuja hacia la superficie. Una luz que esclarece las dudas y me ayuda a comprenderlo todo. Que la marea, tal y como sube, baja. Que las tormentas amainan y el mar también se viste de calma. Que detrás de las nubes nunca deja de brillar el sol. Que dejar correr el tiempo es positivo y productivo. Que de no hacerlo el disfrute sería efímero. Porque para lanzarse al mar primero hay que reparar las grietas del bote y restaurar la ilusión por volver a ver el reflejo de la luna con su estela blanca. Y la distancia me permite ahora valorar la situación sin el torpe impedimento del desasosiego, siempre tan tempranero e inoportuno. Y entiendo que el mar nunca dejará de ser azul, como yo nunca dejaré de admirar el azul del mar en tus ojos.

Y es que Sucede Que Hoy llegué al fondo y lo valoré...

2 comentarios :

Anónimo | 22:00

Lo bueno de darse con el fondo...es que desde ahí comienzas a levantarte.

Un saludo.

Hoy brevedad, mañana examen.

Pablo Martín Lozano | 22:43

Por eso es tan importante valorar esa llegada. Hay quien lo ve gris. Yo en cambio, en mi intento permanente por ver el lado positivo de la realidad.

Suerte en tu examen, yo también tengo mañana.

Saludos.