Y De Serlo Dejarás
Porque tres días son suficientes para una historia. Incluso tres horas, tres minutos o tres segundos. Porque un mínimo suspiro puede provocar al alma. Un roce, una mirada; un perfume, una palabra. Sentir cómo amanece cuando entras por la puerta sea el alba, media tarde o madrugada. Volver cuando anochece y que tu blanca luz alumbre mi cama. Hablar entre suspiros dibujando con sonidos sentimientos aflorando en rama. Compartir instantes juntos adornados con sonrisas, pestañeos y palabras aterciopeladas. Que sólo con saberse a tu lado es mi pecho el que domina, mi mente la que acata y mi garganta la que tímida lucha entre una voz templada. Porque robas mi aire con tu sola apariencia y suscitas ilusiones abocadas al fracaso cuando es su nombre el que pronuncias y me relegas a la nada. Pero no tiene importancia porque por esa historia perdería hasta la identidad; perdería casi hasta la dignidad, si a cambio te tuviera aunque fueses de cristal. Porque tres días, tres horas, tres minutos o tres segundos son más que suficientes para darse cuenta de que eres cuanto menos digna de escuchar; de que envuelves con tus ojos una brisa azul glacial; de que sabes que levantas mis pasiones sin poderlo remediar. Y ni tu remedias ni yo me intento frenar. Me doy rienda suelta para tratar de disfrutar, de aprovechar cada milésima hasta que la vida nos prive del regalo de hablar, y después de cierto tiempo sea el destino el que no olvidando mis palabras, vuelva a ti y tu a mí, a venirme a rescatar. Y vivir esos tres segundos, tres minutos, tres horas y tres días. Y seguir a por semanas, a por meses, con mil años por llegar. Y sentir que fuiste un sueño de barro y ahora te tengo de verdad. Que me miras y no hablas porque tus labios y los míos no se pueden separar. Que uno aprende que con tiempo y con paciencia, los deseos vienen para hacerse realidad. Tú lo fuiste y lo has sido; tú lo eres y de serlo dejarás.
Y es que Sucede Que Hoy con tres segundos me conformo...
8 comentarios :
A veces basta con un segundo, ese en el que te despiertas en mitad de la noche, abres los ojos y ves a esa persona a tu lado. Es más que suficiente para que se dibuje una sonrisa dulce.
Espero que tu deseo deje de serlo para convertirse en una realidad.
Mil besos.
Hola Encarni. A ese tipo de segundos me refiero. Del tuyo subyace la suerte de dormir con la persona a la que quieres, pero para los que no tenemos esa suerte, nos basta un segundo en el que al menos podamos verla a lo lejos. La sonrisa dulce se dibuja casi igual.
Besos y gracias.
Me tiene fascinada la facilidad de pabra que tienes, enhorabuena.
Muchas gracias Ana. Sólo juego con ellas, con sus formas, sus sonidos, sus significados...
Por cierto, ¿Nueva aquí? ¿Te conozco?
Saludos.
Hermoso!!
Logras transmitir el deseo de ese instante en el que el tiempo sobra, y queda sólo la esencia de este.
Gracias, porque tus palabras demuestran que no importa el tiempo o la circunstancia, se puede sentir intensamente incluso en lo efímero de los segundos.
Un Saludo!
Hola Berita y gracias a ti por el comentario. Es cierto, el tiempo es una categoría adquirida y perceptiva que en ocasiones lo único que hace es limitarnos porque nos dedicamos a ver su paso sin disfrutar de lo que nos permite estar haciendo/viviendo.
Hay veces en las que se puede suspender...en las que basta una milésima para disfrutar sin su presión.
Besos!
Hola, no me conoces,hace tiempo buscaba un poema, he puesto una frase y ha salido tu blog, y me han enganchado tus textos, me encanta esa facilidad de palabra que tienes, a mi también me gusta mucho escribir pero se me da mejor escribir con luz. Aquí puedes encontrarme a mi: www.anagarcia.es.
Saludos
Hola Ana, encantado ahora de"conocerte". Me ha gustado muchísimo tu web y tu trabajo. Espero tener más tiempo esta noche y perderme por tus fotografías. A mí también me encanta y es un aspecto qe trato de cuidar bastante en mi rincón. Gracias por tu comentario.
Saludos!
Publicar un comentario