Amor de Madre

Amor de Madre

Hoy he visto a una chica por la calle que me ha llamado la atención. No. Qué va. No es que fuese preciosa, ni mucho menos, simplemente que por el hueco que le quedaba entre el pantalón y la camiseta se le veía un enorme tribal tatuado de parte a parte de la rabadilla. Hasta ahí algo aparantemente normal o, cuanto menos, cotidiano entre los jóvenes de hoy en día. El problema es que ella lo llevaba medio emborronado y hacía un efecto horroroso.

No me gustan los tatuajes, pero sin duda si me viera forzado a hacerme uno tendría bien claro cuál sería: el más que conocido y difundido Amor De Madre. Ójala, por cierto, nunca me tenga que ver forzado a ello porque hay que ver lo ¿desprovisto de belleza? que es. En fin, que hasta aquí no ha sido más que un preámbulo de lo que en realidad quiero contar.

Casi a petición, sino popular sí familiar, me veo abocado a escribir un post íntimamente dedicado a alguien muy especial para mí. Supongo que con lo del tatuaje anterior queda claro para quien va. Sí Mamá, hola. Al final vas a tener lo que tanto me has pedido y por otro lado tanto te mereces.
Parece mentira pero me resulta más sencillo escribir medio filosofeando acerca de los problemas del periodismo que enfrentarme a un teclado para dirigirme a mi propia madre. No temas Mamá, no es que pretenda ocultar nada, simplemente es que al fin y al cabo tú sabes todo de mí, incluso en ocasiones me atemoriza tu olfato maternal, esa especie de poder sobrenatural que todas las madres tienen para hacer un diagnóstico completo del estado de salud y anímico de sus hijos. En fin, creo que ya he aprendido a convivir con él (aunque también es cierto que a veces me gustaría poder ocultar más cosas...¡qué digo!...¡una sóla cosa! pero contigo es tarea imposible.
Supongo que el hecho de haberme llevado dentro durante tanto tiempo nos unió de manera especial. En cualquier caso Mamá, no dejes que nunca eche en falta ese sentimiento porque sino me veré perdido. ¿Quién pasará noches en vela esperando a que vuelva? ¿Quién cocinará durante horas? ¿Y la ropa? ¿Quién estaría pendiente de mí?...¿Que suena egoísta? Tal vez, pero Mamá, a cambio te estoy escribiendo una entrada en mi blog. No, es broma, ciertamente sería difícil para todos.

En fin querías que te escribiese algo y sé que ni de lejos esto ha cubierto tus expectativas, pero te encomiendo a que cada día entres aquí, en mi pequeño rincón y leas lo que escribo. A ti te puedo contar todo a la cara y, como he dicho, se me hace complicado escribirte así. Es demasiado frío, al menos, para como tú y yo estamos acostumbrados a relacionarnos. Así que espero que disfrutes leyendo este espacio, pero que lo hagas más leyendo cada día sobre los diferentes temas. Y recuerda, si un día tuviera que hacerme un tatuaje, ya sabes cual sería.

No Papá, no me olvido de ti. Simplemente aplica todo este texto y donde leas "mamá" cámbialo por "papá", claro que preferiría que obviases la parte de "el hecho de haberme llevado dentro durante tanto tiempo...", más que nada por no pisotear mis conocimientos sobre la reproducción humana. Sería haber malgastado tu dinero en colegios privados.

Y es que Sucede que Hoy me acordé de vosotros...